¿Cómo separar exitosamente dos espirales sin romperlos?

Y si, estamos en Santa Fe. El calor, la cercanía con el río y la humedad provocó que desapareciera de las góndolas buena parte de la provisión de todo tipo de repelentes.

En la búsqueda por el método más efectivo de eliminar a estos molestos insectos de nuestros hogares, los espirales quizás son una de las soluciones más efectivas. Si embargo, existe un serio problema con este invento y es que aún cuando el hombre llegó a la luna o existe una red que nos mantiene comunicados desde cualquier lugar del planeta, todavía, en pleno siglo XXI, es casi imposible separar dos espirales sin que se rompan.

Quien en estos días ha tenido la suerte de conseguir en el mercado un sobre de espirales con su respectivo soporte, tal vez por estas horas ya haya desistido de su uso, luego de dejar trocitos de espiral por toda la mesa y recordar muy bien a las madres de los inventores de este repelente.

Muchos dicen saber cómo es la mejor forma de separarlos, y creen tener el secreto. Por ejemplo, en la página de internet de uno de los mayores fabricantes de espirales e insecticidas, (http://www.proteccionfuyi.com.ar) solo se aclara, con cierta liviandad en el manual del espiral: “Separe cuidadosamente las dos espirales”. ¿Qué significa cuidadosamente?

Quienes creen conocer todos sus secretos, aseguran que lo primordial es colocar los dedos pulgares sobre la parte central de los espirales y hacer un pequeño movimiento que debería hacer que todo se separe con naturalidad. Pero nada de esto ocurre y lo más probable es que se genere un entramado casi irreductible o que todo se parta en mil pedazos, tal como ocurre en este genial tutorial:

Las condiciones del tiempo, encima, nunca parecen colaborar: si el día está húmedo, como por estas horas, el material se tornará gomoso y encima costará más que encienda. Si está seco, lo más probable es que se haga trizas.

Y ni que hablar del momento posterior de calzar el soporte en el pequeño orificio que debería hacer equilibrio al espiral, el que muchas veces –generalmente de manera proporcional a la necesidad de encenderlo con rapidez— está severamente tapado.

Ante esta cuestión, son varios los tutoriales que intentan darnos una mano con este problema. Aquí te dejamos algunos. Será sólo cuestión de probar y rogar que funcionen… o dejarse vencer por los mosquitos y esperar la llegada del frío.

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