5 cosas que no tenés que hacer si querés tener amigos

Tener amigos verdaderos, de esos que te van a acompañar durante toda tu vida, no es sólo una cuestión de buena suerte. Tiene que ver también con tu forma de ser y el modo en que elegís para moverte con la gente. Aquí hay una lista de lo que no tenes que hacer jamás si lo que deseas son compañeros leales y amistades reales:

1. No seas necesitado: Esto no sólo aplica a los noviazgos, sino también a las amistades. La gente puede oler la desesperación a una milla de distancia un exceso de necesidad tuya supone para la otra persona una carga que muchas veces no tiene ganas o simplemente no puede soportar. Tené en cuenta que la gente también tiene su propia vida, su trabajo y otras amistades, no les estés exigiendo presencia todo el tiempo. Lo importante es que la gente que te quiere de verdad va a estar siempre que las necesites, pero esto no puede ser todo el tiempo. No los llames mil veces al día ni los molestes innecesariamente con mensajes exigiendo respuestas inmediatas.

2. Dejá de criticar: Lo admitimos, los chismes pueden ser divertidos al principio, especialmente sobre aquellas personas que te han hecho daño o sobre ese compañero de trabajo que te hace la vida imposible. Pero una cosa son comentarios al pasar dentro de una reunión y otra muy distinta es que estés mortificando todo el día a tus amigos hablando mal de esa persona que no querés. Si hablás mal de la gente, tus amigos con toda razón podrían dudar si no serías capaz de hacer lo mismo con ellos en un futuro. Una regla que ayuda es no decir nada sobre otros que no les dirías en sus caras. No te olvides que nuestra opinión sobre la gente también habla sobre lo que somos nosotros. Y nadie quiere estar al lado de alguien que lo único que hace es criticar.

3. No seas negativo: Como dice el refrán «A la miseria le encanta la compañía». Y tiene razón. A menudo encontramos consuelo al compartir nuestros problemas con otros. Sin embargo, si eso es todo lo que hacés, estás saboteando tus relaciones. Nadie quiere estar alrededor de alguien que todo el tiempo tiene una nube negra sobre su cabeza. No sólo es asfixiante para el resto sino que también es malo para uno. Tené en cuenta que todas las personas tienen sus propios problemas, y en vez de enfocarte en hablar de los tuyos todo el tiempo sería mejor intentar buscarles soluciones así podés avanzar. Es cierto, hay problemas graves y en ellos tus amigos siempre te van a acompañar. Pero la mayoría de las cosas que nos afligen en la vida tienen alguna salida. No te quedes en la mera queja, sacate la nube negra de la cabeza e intentá solucionar tus cosas.

4. Escuchá mas, hablá menos: Todos hemos estado en una conversación con alguien que demuestra a través de tus gestos no estar escuchando ni una palabra de lo que decimos. Más que escucharnos, están esperando el momento en que terminemos así pueden contar su historia. Uno de los ejes fundamentales de la amistad es estar atento y escuchar, incluso aquellas cosas que no son dichas. Esto es una señal de que el otro realmente te importa y quién sabe, quizás manteniendo tu boca cerrada aprendés algo que no pensabas.

5. Pretender ser alguien que no sos: La amistad no se trata de ser popular, se trata de mostrarse genuinamente y rodearse de personas a las que de verdad les guste tu personalidad. Nunca tendrás cosas en común con tus amigos si querés ser alguien más. Sos un ser único y sólo valorándote lograrás que tus amigos también te valoren.

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