Esta es la manera más efectiva de limpiar tus bombillas
Para los amantes del mate no hay nada más molesto que una bombilla tapada. Pero muchas veces, aún sin llegar a estos extremos y sin darnos cuenta, nuestras bombillas acumulan en su interior una gran cantidad de restos y mugre que no sólo arruinan el verdadero sabor de nuestro mate sino que pueden ser perjudiciales para nuestra salud.
La cuestión es saber limpiarlas bien para que se mantengan limpias y en perfecto estado, además de la necesidad de higienizarlas como corresponde pero sobre todo dejarlas relucientes, más aun aquellas que son más delicadas como las de alpaca.
Las bombillas van acumulando yerba y azúcar u otro condimento que agreguemos y así es como se tapan. Para evitar la suciedad hay que limpiarlas tanto por dentro como por fuera. Para este procedimiento necesitamos una cacerola, agua y por supuesto el tradicional y excelente bicarbonato de sodio.
Entonces ante todo, se llena la cacerola con agua y se le añade unas tres cucharadas de bicarbonato. Luego se incorpora la bombilla o las bombillas dentro y se dejan allí hasta que el agua rompa en hervor, lo cual demorará unos minutos. Con el paso del tiempo verán cómo el agua se vuelve más oscura. Una vez pasada una hora se retiran las bombillas y se las deja sobre un paño limpio hasta que se sequen solas.
Tengan en cuenta para la limpieza que la bombilla consta de muchas partes. En el caso de las bombillas de alpaca, se las ha de limpiar con una franela limpia a la cual se le coloca bicarbonato y se va refregando bien aun en aquellas zonas que son más complicadas hasta que vuelvan a mostrar su brillo original.
Recuerden que si se toma mucho mate y varias veces al día, es conveniente limpiarlas una vez por semana para que se mantengan higienizadas, para destaparlas, y que luzcan con el mismo brillo que tenían cuando fueron compradas.