Cómo dejar una sartén quemada como nueva y sin esfuerzo
A medida que vamos usando los utensilios de cocina, se van ensuciando y percudiendo. Algunos de ellos se arruinan con el fuego, como la sartén quemada que forma una costra dura que se vuelve cada vez más difícil de limpiar.
Aunque hay muchos productos de limpieza en el mercado, de tipo industrial, la mejor forma de solucionar este tipo de problemas es con elementos naturales, que solemos tener disponibles en la cocina. Sin químicos ni detergentes especiales, que suelen ser carísimos, podemos obtener el mejor resultado y rescatar la sartén quemada que dejamos de usar.
No es necesario refregar con esponjas de acero, que rayan y maltratan las superficies metálicas. Ni sacar músculos en el brazo de tanto pulir: con los productos correctos, se logran resultados asombrosos. Hay trucos para la base y para el interior de la sartén.
1.Papa y sal gruesa
- Cortar la papa por la mitad
- Espolvorear la zona quemada con sal gruesa
- Frotar con la papa como si fuera una esponja, con movimientos circulares
- Enjuagar con agua caliente
- Pintar con una cucharadita de aceite de oliva la superficie, para protegerla en el futuro
También se puede reemplazar la papa con una bola de papel aluminio. La fricción con la sal gruesa irá despegando todo lo quemado de la base de la sartén.
2. Vinagre blanco y bicarbonato de sodio
Puede que no lo sepas, pero tanto el vinagre blanco como el bicarbonato de sodio tienen múltiples aplicaciones en la limpieza del hogar. En este caso en concreto, desprenden los restos adheridos de las sartenes dejando su superficie limpia y brillante.
Las cantidades que debes utilizar de estos ingredientes para limpiar una sartén quemada son ½ taza de vinagre blanco (125 ml), una taza de agua (250 ml) y dos cucharadas de bicarbonato de sodio (30 g). Para obtener unos óptimos resultados, sigue los siguientes pasos:
- En primer lugar, vierte el vinagre blanco sobre la sartén quemada.
- Añade el agua y ponlo a hervir.
- A continuación, retira la sartén del fuego y agrega el bicarbonato de sodio. Comenzará a reaccionar con un efecto efervescente, lo que hará que la suciedad se despegue con facilidad.
- Después, frota con la esponja del estropajo y desecha los restos quemados.
- Por último, si queda algún residuo pegado, frota sobre él con bicarbonato de sodio seco.
3. Bicarbonato de sodio y limón
El bicarbonato de sodio tiene un poder astringente que te ayudará a remover los residuos de grasa y alimentos pegados que van afectando la superficie de las sartenes cada vez que las usamos. Pero además, combinado con limón, desincrusta con facilidad los restos quemados.
Como en los casos anteriores, solo necesitas dos ingredientes que todos tenemos en casa, que son dos cucharadas de bicarbonato de sodio (20 g) y medio limón. Estos son los pasos que debes seguir para limpiar una sartén quemada con este remedio:
- Antes de nada, distribuye el bicarbonato de sodio sobre la sartén.
- Después, toma el medio limón y frota por toda la superficie.
- Restriega durante unos minutos hasta que la sartén adquiera su aspecto brillante original.
- Si las manchas no terminan de desaparecer, caliéntala con un poco de vinagre y repite el proceso.
5. Limpiar una sartén con Coca-Cola
Sí, has leído bien, se puede limpiar una sartén con Coca-Cola, así como otras muchas cosas. Este truco también es muy sencillo, verás como tus sartenes quedan como nuevas. Estas son las instrucciones que debes seguir:
- Primero, añade una taza de Coca-Cola dentro de la sartén.
- A continuación, pon a calentar la sartén a fuego lento entre 40 y 60 minutos.
- Pasado este tiempo, retira la sartén del fuego y frota con la esponja del estropajo sobre la parte quemada hasta eliminarla por completo.
Nuestro consejo es que nunca utilices productos químicos para limpiar el interior de las sartenes de acero inoxidable, en especial las antiadherentes, pues le quitarás su capa protectora y no cocinará como al principio.
Todo lo que sean productos abrasivos tampoco son recomendables para el interior de la sartén. En cuanto a la base, no hay problema, pues está diseñada para soportar altas temperaturas y, por ende, resiste los productos agresivos. ¿Cuál es tu remedio preferido?
Tanto con la gaseosa como con el vinagre, si la sartén quemada es antiadherente, no se quita la protección y la comida no se pega.