Una deliciosa idea para disfrutar de la cebolla colorada
Las cebollas son plantas de la especie «Allium cepa», originarias de Asia central y extendidas por todo el mundo. La cebolla «para guardar» crece durante el verano y se recolecta ya madura en otoño. Es rica en compuestos de azufre, más seca y fácil de almacenar durante un período largo.
El agua supone el 90 % de su composición y el 10% restante es una bomba de nutrientes con muchas propiedades beneficiosas sobre nuestra salud: vitaminas del grupo B; también vitaminas E y C, con acción antioxidante, minerales y oligoelementos como potasio, magnesio, fósforo, calcio, sodio y azufre entre otros, además de fibra y aminoácidos esenciales. En las cebollas y ajos los flavonoides están presentes en grandes cantidades.
INGREDIENTES
- Cebollas morada medianas, en rodajas muy finas 3
- Agua 1 taza
- Vinagre de arroz (o mezcla de vinagre blanco y vinagre de manzana) 1 taza
- Azúcar mascabado/sirope de arce 1 cucharada
- Sal marina fina ½ cucharadita
- Semillas de mostaza (opcional)1/4
Entre todos los flavonoides, el más activo contra el estrés oxidativo es la quercetina. La morada o roja es la variedad de cebolla más rica en esta sustancia. En verano se pueden recoger y consumir en tierno o esperar a octubre para conservarlas.
Las cebollas son un básico en nuestra despensa y resultan imprescindibles en gazpachos, ensaladas, ensaladillas, sofritos, guisos y tantos otros platos. Son una auténtica maravilla!
La cebolla roja es maravillosa por su aspecto y sabor y aunque tiene infinitas posibilidades tanto cruda como cocinada, hoy les ofrecemos una forma de prepararlas que hará que muchos de tus platos pasen a ser infinitamente mejores. La cebolla encurtida es un básico para cualquiera que se inicie en el mundo del escabeche, la salmuera y los encurtidos. Muy sencilla de realizar y perfecta para mejorar cualquier ensalada, tostada, bocadillo, tacos o plato que requiera un contrapunto final crujiente, picante y dulce.
Preparación:
Con la ayuda de una mandolina cortar las cebollas rojas en rodajas muy finas. El truco para hacer cebollas en escabeche de forma rápida es cortar las cebollas muy finas para que se ablanden y absorban el aderezo rápidamente.
Llenar el recipiente de vidrio para conserva con las cebollas compactándolas bien. Añadir los granos de mostaza (también se puede usar pimienta negra, semillas de cilantro, laurel, etc.)
En una recipiente mezclar el agua, ambos vinagres, el azúcar, la sal y llevar a fuego medio hasta que se disuelvan el azúcar y la sal. Dejar reposar unos minutos y verter con cuidado la mezcla sobre el frasco de las cebollas.
Dejar que las cebollas encurtidas se enfríen completamente a temperatura ambiente (aproximadamente de 20 a 30 minutos), cerrar convenientemente y refrigerar las cebollas hasta su consumo. Pueden conservarse hasta 2 semanas en el frigorífico.
Trucos
Si queremos un resultado más crujiente optaremos por cortar la cebolla en rodajas más gruesas. La cebolla necesitará unas horas para que el líquido penetre, todo dependerá de nuestro gusto: desde un par de horas a tres o cuatro días para un sabor más intenso.
No tenemos porque usar siempre el mismo vinagre, podemos ir experimentando y combinándolos entre sí. El vinagre de manzana, el de arroz y el de Jerez son mis favoritos, incluso el de Jerez al Pedro Ximenez, pero podemos ser creativos para conseguir nuestra combinación favorita.