Cómo reducir los síntomas de la alergia al polen
Para más de 400 millones de personas en todo el mundo, la primavera es sinónimo de estornudos, secreción nasal, lagrimeo, sensación de cansancio y otros síntomas de la alergia al polen. Esta cifra, facilitada por la Organización Mundial de la Salud, aumenta cada año.
Dentro de las enfermedades alérgicas, la rinitis alérgica o fiebre del heno es la enfermedad más común. Afecta a entre el 10 y el 40 por ciento de la población mundial, especialmente a los jóvenes, y el número de casos está aumentando de manera notable. “No es una enfermedad grave ni supone una amenaza para la vida, pero tiene dos características que le dan una gran relevancia socioeconómica: su alta prevalencia y el notable deterioro de la calidad de vida de quien la padece”, explica Teresa Dordal, presidenta del Comité de Rinoconjuntivitis de la Seaic.
Y es que, además de producir síntomas clásicos como sensación de picor, estornudos, lagrimeo o goteo de nariz, la rinitis alérgica también repercute en las actividades cotidianas de los pacientes, que pueden manifestar un grado importante de fatiga y cambios de humor, cierto deterioro de la función cognitiva, depresión y ansiedad. “Esto empeora su calidad de vida y afecta al rendimiento laboral y escolar”, afirma el secretario de la Seaic, Darío Antolín.
Aunque la alergia no tiene cura hasta la fecha, sí se pueden tomar una serie de medidas para reducir sus síntomas que pasan por evitar en lo posible el contacto con el polen.
Recomendaciones ante la alergia
- Evitar las salidas al campo y las actividades al aire libre los días en que la concentración de polen en el aire es elevada. Los niveles de polinización se pueden consultar en la aplicación móvil Polencontrol, avalada por la Seaic, o en la web www.polenes.com.
- Mantener las ventanas de la casa cerradas durante el día. Para ventilar una habitación son suficientes cinco minutos.
- Proteger los ojos con lentesde sol y cubrir la nariz y la boca con una mascarilla los días de alta polinización.
- Viajar con las ventanillas del coche subidas para evitar al máximo el contacto con el polen.
- Cuando se haya estado al aire libre, es recomendable ducharse y cambiar de ropa al llegar a casa.
- Usar filtro antipolen en el coche y purificadores de aire en casa para reducir la exposición al alérgeno.
- No realizar ejercicio físico intenso en época de polinización para evitar episodios de asma.
- No cortar el césped ni podar en días de polinización intensa.
- Cuando los síntomas de la alergia aparecen, consulte con su médico y evite automedicarse.
- Es aconsejable pedir cita con el alergólogo y seguir un tratamiento integral enfocado a tratar la causa de la alergia.