Un estudio reveló que los gatos sufren de ansiedad al separarse de sus dueños

La investigación contradice la opinión generalizada de que este animal doméstico es “antisocial” y puede estar solo tranquilamente.

Una investigación encabezada por Daiana de Souza Machado, de la Universidad Federal de Juiz de Fora, en Brasil, sostiene que el fenómeno de la ansiedad en los gatos al ser separados de sus dueños no ha sido estudiado del mismo modo que en los perros.

Publicado el pasado miércoles en la revista PLOS ONE, el estudio concluye que los felinos también sufren en ausencia de sus dueños. Esto, a pesar de la opinión común generalizada de que pueden estar solos sin problemas, e incluso llamarlos “antisociales”.

La investigación se base en un cuestionario completado por 130 propietarios de 223 gatos. Los participantes tenían que mencionar los cambios de comportamiento o de estado emocional de sus mascotas en su ausencia, en relación a cuando estaban juntos.

El resultado del estudio sobre los gatos y la ausencia de sus dueños

Según el resultado, 30 gatos (el 13,45 % de los animales observados), presentaron por lo menos un síntoma relacionado con la ansiedad por separación. Las señales más frecuentes incluían comportamiento destructivo, vocalización excesiva, micción en lugares inapropiados, apatía, agresividad y agitación.

gatos
Un estudio reveló que los gatos sufren de ansiedad al separarse de sus dueños. 

Los autores admitieron que el cuestionario solo puede ser considerado como un primer paso para la investigación del problema, debido a limitaciones como la imposibilidad de observar al animal en la ausencia del propietario, o la inevitable subjetividad en las respuestas de los participantes. Sin embargo, descubrieron ciertos factores que influyeron en los cambios de comportamiento de los felinos.

Por ejemplo, los domicilios con una mascota y en los que no había juguetes reportaron un mayor nivel de señales de ansiedad. Asimismo, el problema fue asociado con la cantidad de mujeres residentes en el hogar: los síntomas de los gatos variaban de acuerdo a una mayor o menor presencia femenina.

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