Atención: La primavera activa a los infieles

La primavera es «la estación del amor». Pero también la del deseo y las ganas de concretar relaciones prohibidas. Lo confirman los médicos, los expertos en relaciones y los cambios en el uso de las tecnologías. De hecho, con los primeros calores aumentó la actividad de usuarios argentinos en uno de los sitios para relaciones extramatrimoniales.

En espacio online para infieles Second Love aseguran que notan de forma reiterada que a más calor, más aventuras. «En enero de 2015 había 155.000 usuarios registrados en el país y se observó que durante las vacaciones de verano las búsquedas aumentaron un 40 %», sostiene Matías Lamouret, vocero para América Latina de ese sitio.

Pero eso no es todo, cuando los árboles se llenan de flores, también crece un 35 % el tiempo que los «tramposos» permanecen conectados, en comparación con el resto del año.

¿Quienes usan esta red social? En Argentina, el 70 % de los usuarios son hombres y el 30 % mujeres. En su mayoría son personas casadas o en pareja, mayores de 30 años, profesionales y con hijos, que no concurren a bares o boliches, pero quieren conocer gente nueva. No tienen la intención de divorciarse, sino de complementar lo que –según ellos– sus parejas no les brindan: contención afectiva, atención a sus preocupaciones y, por supuesto, sexo frecuente.

Otro sitio web para infieles, el español Victoria Milan, informó en un comunicado que en esta estación aumenta la actividad de los usuarios. Además, hizo una encuesta entre 3.568 miembros, que mostró que el 69 % dijo sentirse «diferente» con la llegada de la primavera y, entre ellos, el 37 % aseguró tener más apetito sexual. Incluso, cuando les preguntaron en qué estación son más activos entre las sábanas, la primavera (36 %) le ganó al verano (31 %). Por otro lado, el 79% asumió tener más ganas de vivir aventuras cuando empieza el buen tiempo.

«Posiblemente sí» haya más infidelidad en primavera, afirma Pedro Horvat, ex miembro de la Asociación Psicoanalítica Argentina (APA). «En el plano biológico, la mayor luminosidad estimula la hipófisis y, con ello, la producción de hormonas. En una perspectiva más general, el buen tiempo genera entusiasmo, mayor actividad y una nueva mirada sobre el cuerpo. En rigor, los ciclos climáticos influyen en la conducta sexual de todas las especies, de modo que, por más urbanos y civilizados que nos creamos, no somos totalmente ajenos a esto», agrega el psiquiatra y psicoanalista.

Sobre la influencia de Internet, el médico opina: «Estas páginas y aplicaciones tienen una importancia creciente. No sólo por lo obvio –la enorme lista de posibilidades a disposición de quien busca–, sino porque generan citas con supuestos implícitos aceptados por los dos». Además, para Horvat, tienen un agregado adicional: «El otro es un completo desconocido, lo que permite encuentros sin condicionantes previos. La pareja ocasional es una pantalla en blanco sobre la cual cada uno proyecta su propia película», metaforiza.

 

Fuente: Clarín

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