Estas son las mejores imágenes del Telescopio Hubble

El telescopio espacial Hubble lleva 30 años sacando fotos alrededor de la Tierra, lo que lo convierte en uno de los observatorios espaciales más longevos de la NASA.

En estas décadas, su misión ha sido orbitar la atmósfera exterior de nuestro planeta para indagar en las profundidades del cosmos, logrando que nuestro conocimiento del espacio sea cada vez más extenso.

A lo largo de toda su historia, el Hubble ha capturado más de un millón de postales entre planetas, estrellas, galaxias y nebulosas. Libre de la interferencia de la atmósfera terrestre, el observatorio espacial devela los secretos del universo con una nitidez sin precedentes.

A continuación, algunas de las impresionantes imágenes que el telescopio ha tomado en esos 30 años:

Auroras en Urano captadas por el Hubble

Foto: ESA / Hubble & NAS / L. Lamy / Observatoire de Paris

Los Pilares de la Creación

El Telescopio Espacial Hubble de la NASA revisitó en 2014 los famosos Pilares de la Creación, revelando una visión más nítida y amplia de las estructuras en esta imagen de luz visible. Los pilares son parte de una pequeña región de la Nebulosa del Águila, una vasta región de formación estelar a 6.500 años luz de la Tierra. Los astrónomos combinaron varias exposiciones de Hubble para armar una vista más amplia. Los pilares altísimos tienen unos 5 años luz de altura. Los pilares están bañados por la luz ultravioleta de una agrupación de estrellas jóvenes y masivas ubicadas en la parte superior de la imagen. Se pueden ver serpentinas de gas saliendo de los pilares a medida que la radiación intensa se calienta y se evapora en el espacio. Las regiones más densas de los pilares están ocultando, tras ellas, el material de la poderosa radiación. Las estrellas nacen en lo profundo de los pilares, que están hechos de hidrógeno gaseoso frío mezclado con polvo.Foto: NASA / ESA / Hubble Heritage Team / STScI/AURA)

La nebulosa de la Vela

El Telescopio Espacial Hubble de la NASA ha desvelado con asombroso detalle una pequeña sección de los restos en expansión de una estrella masiva que explotó hace unos 8,000 años.

Conocida como la nebulosa de la Vela, lo que podemos apreciar en esta imagen son parte de uno de los restos de supernova más conocidos. Su nombre deriva de las delicadas estructuras filamentosas que componen la nebulosa, la cual tiene unos  110 años luz de diámetro. Se encuentra a unos 2.100 años luz de distancia en la constelación de Cygnus, el Cisne.

Esta vista es un mosaico de seis imágenes del Hubble de un pequeña área de aproximadamente dos años luz de diámetro, la cual solo cubre una pequeña fracción de la vasta estructura de la nebulosa.Foto: NASA, ESA, and the Hubble Heritage Team / STScI/AURA)

Una estrella agonizante

La nebulosa Ojo de Gato se formó cuando una estrella moribunda semejante al Sol fue expulsando capas esféricas de gas a intervalos regulares, como los círculos producidos por una piedra en un lago cósmico. En 2004 el Hubble volvió a visitarla y desveló al menos 11 círculos concéntricos de gas que habían sido desprendidos por dicho astro. Esta imagen en alta resolución reveló a los astrónomos que las capas de material estelar habían sido expulsadas en intervalos de 1.500 años luz, creando una estructura cósmica similar a las capas de una cebolla.

Nebulosa de la Hélice

La nebulosa de la Hélice resplandece en su cobertura gaseosa expulsada por una estrella moribunda del tamaño del Sol. Aunque parece una rosquilla vista desde la Tierra, las evidencias científicas sugieren que su formación consiste en dos discos gaseosos prácticamente perpendiculares entre sí. Situada a 690 años luz, es una de las nebulosas planetarias más cercanas a la Tierra.

La Supernova 1987A

La supernova 1987A se encuentra a 163,000 años luz de distancia, en la Gran Nube de Magallanes, donde se está produciendo una tormenta de fuego debido al nacimiento de miles de estrellas. Las estrellas lejanas sirven como telón de fondo para la Supernova 1987A, ubicada en el centro de la imagen. El anillo brillante alrededor de la región central de la estrella explotada está compuesto del material expulsado por la estrella unos 20,000 años antes de su desaparición. Nubes gaseosas rodean la supernova. El color rojo de las nubes representa el brillo del gas de hidrógeno, que está alimentando una tormenta de nacimiento estelar.

La Supernova 1987A fue descubierta en 1987, y el Hubble comenzó a observar la estrella explotada a principios de la década de 1990. Esta última vista fue tomada por el telescopio en enero de 2017.Foto: NASA / ESA / Harvard-Smithsonian Center for Astrophysics/ STScI

Capturando supernovas

Los astrónomos combinaron las observaciones de 3 observatorios para producir esta colorida imagen multidimensional de los intrincados restos de la Supernova 1987A. El color rojo muestra el polvo recién formado en el centro del remanente de la supernova, el telescopio ALMA en Chile. Los tonos verdes y azules revelan dónde la onda expansiva de la estrella colisiona con un anillo de material alrededor de la supernova. El verde representa el resplandor de la luz visible, capturado por el Telescopio Espacial Hubble de la NASA. El color azul revela el gas más caliente y se basa en datos del Observatorio de rayos X Chandra de la NASA. Inicialmente, el anillo se iluminó con el destello de luz de la explosión original. En años posteriores, el material del anillo se ha iluminado considerablemente a medida que la onda expansiva de la explosión se estrella contra él.

Ecos de luz

¿Qué causó esta explosión enV838 Mon? Por razones desconocidas, la superficie exterior de la estrella V838 Mon se expandió de repente convirtiéndose en la estrella más brillante de toda la Vía Láctea en enero de 2002. Luego, de repente, se desvaneció. Nunca se había visto un destello estelar como este; las supernovas y las novas expulsan materia al espacio y aunque el flash V838 Mon parece expulsar material , lo que se ve en la imagen es en realidad un eco de luz que se mueve hacia el exterior de la estrella.

En un eco de luz, la luz del flash de la explosión se refleja por los anillos de material sucesivamente más distantes en la compleja serie de polvo y gas interestelar que ya rodeaba la estrella. Foto: NASA / ESA

La hermana gemela de la Vía Láctea

La Vía Láctea es una galaxia espiral, una de las más comunes en el universo. Y aunque esta imagen tomada por el Telescopio Espacial Hubble bien podría tratase de nuestra galaxia, se trata en realidad de NGC 1073, que se encuentra en la constelación de Cetus o el monstruo marino, y que he conocida por los astrónomos como “la Hermana”.Foto: NASA / ESA / Hubble Space Telescope

La nebulosa de reflexión NGC 1999

Foto: NASA / The Hubble Heritage Team

N159 en la Gran Nube de Magallanes

Foto: ESA/Hubble & NASA

Estrellas distantes

Esta imagen, del telescopio espacial Hubble, resulta engañosa: la enana blanca Stein 2051B y la estrella pequeña que hay detrás no son vecinas cercanas; la primera se encuentra a 17 años luz de la Tierra y la segunda a unos 5.000 años luz de distancia.Imagen: NASA, ESA and K. Sahu (STScI)

NGC 6818

Foto: ESA/NASA Hubble NASA7/ J. Schmidt

El centro galáctico

Esta imagen de infrarojos tomada del telescopio espacial Hubble muestra el centro de la Vía Láctea, a unos 27.000 años luz de la Tierra. Usando el espectro infrarrojo los científicos fueron capaces de ver a través del polvo que normalmente oscurece la vista de esta interesante región. Foto: NASA/ ESA

Planeta Marte

Nueva imagen de Marte tomada por el telescopio espacial Hubble el pasado 12 de mayo, cuando el planeta rojo se encontraba a más de ochenta millones de kilómetros de nuestro planeta.Foto: NASA, ESA, the Hubble Heritage Team (STScI / AURA), J. Bell (ASU) and M. Wolff (Space Science Institute)

Nebulosa de la Burbuja

NASA/ESA/Hubble Heritage Team

La nebulosa de La Quilla

El nacimiento y la muerte de las estrellas crean el caos cósmico de esta imagen de la también conocida como nebulosa de Carina. «Visualmente es tan rica y costó tanto montarla – está compuesta por un mosaico de 32 imágenes diferentes, dice Levay–, que merece un lugar entre las favoritas.» Para hacer corresponder los colores con los elementos químicos, se usaron datos de un telescopio terrestre. Foto:HUBBLE/ NASA/ ESA/ N.

Alas celestiales

El gas de una estrella moribunda parece una mariposa, cuyas alas están formadas por la eyección de las capas externas del astro. Las nebulosas planetarias como NGC 6302 han proporcionado al Hubble algunas de sus imágenes más populares. «Son hermosas –declara Levay–, y las modelan dinámicas y fenómenos muy complejos.» Foto: NASA / ESA / HUBBLE SM4 ERO TEAM

NGC 1300

Esta imagen emblemática de la galaxia espiral NGC 1300 captada por el Hubble está llena de detalles: jóvenes y brillantes estrellas azules, brazos de polvo en espiral en torno al núcleo resplandeciente y galaxias distantes visibles a través del conjunto. «Uno podría perderse dentro de esa imagen», afirma Levay. Muchos lo han hecho. Foto: NASA/ ESA/ HUBBLE HERITAGE TEAM / STSCI / AURA / P. KNEZEK WIYN

Cerca pero lejos

En una imagen de gran profundidad, las estrellas más brillantes se encuentran cerca de nosotros, en la Vía Láctea. La mayoría de las restantes, incluido el cúmulo de la parte inferior, están en la galaxia de Andrómeda. Más allá, a miles de millones de años luz, relucen galaxias enteras. «Quizá no parezca gran cosa –dice Levay–, pero es toda la profundidad del cosmos en una imagen.»Foto: NASA / ESA / T. M. BROWN / STSCI

Explosiones cósmicas

Los restos de una supernova de varios siglos de antigüedad, con la rosada onda de choque expandiéndose a más de 17 millones de kilómetros por hora, resplandecen en la Gran Nube de Magallanes como un iridiscente adorno navideño.

Los remanentes de una supernova

En las imágenes del Hubble se puede ver que mientras la supernova perdía luminosidad, los restos de la explosión colisionaban con un anillo de material expulsado miles de años antes por la estrella agonizante, lo que generó los rayos X que iluminan el anillo. En 2011 los restos del centro del anillo, de alrededor de un año luz de diámetro, refulgían con más intensidad, ya que la supernova entraba en una nueva fase de muerte estelar.Foto: NASA / ESA / Pete Challis / CFA

La nebulosa de la Tarántula

Estrellas cien veces más masivas que el Sol atraviesan con su luz la turbulenta bruma de la nebulosa de la Tarántula, en la Gran Nube de Magallanes. El gas y el polvo derivados de las explosiones de las estrellas son el material del que surgirán nuevas estrellas, lo que hace de esta nebulosa uno de los semilleros estelares más activos de nuestro entorno galáctico.Foto: NASA / ESA

Nebulosa Omega

La Galaxia del Sombrero


Descubierta por Pierre Méchain a finales del siglo XVIII, es una de las imágenes más nítidas y espectaculares captadas por el Telescopio Espacial Hubble, especialmente porque el el ángulo con que se ve desde nuestro planeta crea un efecto visual tremendamente impactante. Foto: NASA/ESA y el Hubble Heritage Team (STScI/AURA).

La Nebulosa del Cangrejo


Esta es una de las imágenes más grandes y con mejor resolución tomadas por el Hubble: está compuesta por un mosaico de fotos de menor tamaño que contienen la totalidad de la Nebulosa del Cangrejo. La explosión de esta supernova tuvo lugar hace unos mil años y se cree que los astrónomos japoneses, chinos y nativos americanos registraron el hecho en sus pinturas y libros. Foto: NASA / ESA.

Los ojos que miran


No son pocas las estructuras fotografiadas por el Hubble que tienen aspecto de ojos, figuras o animales: en realidad somos nosotros las personas las únicas que somos capaces de sacarles esas similitudes con nuestro cerebro acostumbrado a formas y objetos que ya conocemos. Las de esta toma son dos galaxias espirales de la constelación del Can Mayor. Foto: NASA/ESA y el Hubble Heritage Team (STScI).

Los anillos de Saturno


En su exploración de los planetas del Sistema Solar, el Hubble nos dejó imágenes tan nítidas como esta del planeta más exótico y sus magníficos anillos: Saturno. Tomada en 2004, en muchas de ellas pueden apreciarse incluso los más pequeños detalles de cómo están formados sus anillos concéntricos. Foto: NASA, ESA y E. Karkoschka (University of Arizona).

El objeto más frío del Universo


Esta foto de la Nebulosa Boomerang, situada en la Constelación de Centauro, está tomada a 5.000 años luz de distancia. En esa nebulosa planetaria se forman planetas alrededor de la estrella central; se considera el objeto estelar más frío encontrado en el universo hasta ahora. 

Galaxias espirales barradas


Esta galaxia llamada NGC 1300 es el ejemplo típico de galaxia espiral barrada, un tipo de formación en el que los brazos de la galaxia no son espirales que llegan hasta el centro, sino más bien dos brazos formados por estrellas que conectan con el centro a través de una barra recta y continua. Foto: NASA, ESA, y el Hubble Heritage Team (STScI/AURA).

Belleza en los colores del universo


Esta es otra de las fotos consideradas más bellas de entre todas las tomadas por el Hubble, simplemente por lo espectacular de su aspecto y colorido. Se corresponde con V838 Monocerotis, una estrella variable situada a 20.000 años luz del Sol.

En las profundidades de las galaxias


Parece que esté aquí al lado, pero en realidad esta galaxia espiral típica, conocida como Messier 66, se encuentra a más de 36 millones de años luz. Su tamaño es tan inmenso que es difícil de imaginar: 96.000 años luz de lado a lado, lo cual quiere decir que ese es el tiempo que se tardaría en cruzarla viajando a la velocidad de la luz: 300.000 kilómetros por segundo.

El misterioso ojo de gato


Su nombre técnico es NGC 6543, pero se conoce como Nebulosa Ojo de Gato: es uno de los objetos estelares más complejos conocidos, debido a las particularidades de su estructura, compuesta por diversas capas cuya formación ni siquiera los astrónomos han entendido completamente todavía. Foto: NASA / Hubble ST.

La Nebulosa del Cono, vista de cerca


Lo que a simple vista parecen pilares y otras estructuras que se dirían de barro o arcilla son en realidad gigantescas nubes de gas, en este caso hidrógeno, que rodean a las estrellas. El Hubble tomó esta imagen con su cámara infrarroja en 1997 y lo que podría identificarse como «viento» en la parte superior, moviendo los gases, es en realidad la atracción gravitatoria de estrellas supermasivas. Foto: ACS Science Engineering Team / NASA.

El nacimiento de las estrellas


En este cúmulo estelar llamado NGC 602, cerca de la Pequeña Nube de Magallanes, millones de estrellas jóvenes emiten radiación y energía en forma de ondas que erosionan el material que las rodea creando formaciones visualmente interesantes. El tamaño de lo que se ve en la foto abarca 200 años luz de lado a lado.

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